Tuesday, April 17, 2012

Chau Teo

Bien por Racing Club. Ciertas acciones no pueden pasar desapercibidas. Los directivos de Racing Club de Avellaneda dieron una lección que, seguramente, marcará un precedente. Pidieron, ya, a la AFA, la anulación del contrato de Teófilo Gutiérrez. Algunos saben qué ocurrió. Otros no.
Les cuento. Racing perdía ante Independiente por 2-1 el clásico “barrial” y al colombiano se le ocurrió abrir la boca de más justo con el árbitro Sergio Pezzotta. Con el guiño del reglamento, el referí le mostró la tarjeta roja. Gutiérrez dejó a La Academia con nueve hombres (había sido expulsado Bruno Zuculini minutos antes).
Cuando finalizó el partido, el arquero Diego Sebastián Saja lo fue a buscar, a su ya ex compañero, dentro del vestuario y se tomó a golpes de puño con Teo. El bueno de Giovanni Moreno quiso separar y se llevó un trompazo de Saja. Teófilo buscó, de dentro de su bolso, un arma (dicen que era de aquellas que se utilizan para jugar Paint-ball; ¿quién cree que pueda cargar eso?) y amenazó a Saja.
Cuando llegó el momento de subir al ómnibus, los jugadores de Racing impidieron que el colombiano viajara con el resto del plantel y abandonó el estadio Libertadores de América en un taxi.
Este bochorno se sumó a la renuncia de Alfio Basile a la conducción táctica de su amado Racing, del club que le abrió las puertas cuando siendo un joven de quince años de edad, arribó a Buenos Aires desde su Bahía Blanca natal. Basile, con el correr del tiempo, llegó a los estándares de ídolo racinguista, algo que es exclusivo para elegidos. El Coco, hoy dicen que está golpeado como nunca. Un tipo defensor de los códigos, que no ha expresado una frase ante los medios luego de su determinación, con la carrera suficiente como para tener el caparazón bien ancho e impermeable, cerró su nuevo ciclo con impotencia.
Teófilo Gutiérrez cometió varios actos de desaprobación. Comenzando por una tonta expulsión ante Boca en la campaña anterior luego de haber llegado tarde tras jugar con la Selección Colombia una jornada de eliminatorias mundialistas, pasando por peleas con rivales en los torneos de verano hasta esta última. En Racing se hartaron.
Para varios, Teo es un excelente jugador. Yo digo es que muy (pero muy) del montón. El que tenga cierta habilidad no implica que sea un magnífico futbolista. Se requiere de una suma de condiciones pera verdaderamente alcanzar la condición de magnífico o distinto.
Racing hizo bien. Se quitó de encima un enorme problema. Barrió el vestuario por el sector que debían. Aunque, lamentablemente, el descarte de algunos será el refuerzo de otros. A Gutiérrez, seguramente, no tardarán en contactarlo.
Abrazo para todos.

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